Aguas polvos, píldoras e inyectables de colágeno de diferentes fuentes... Analicemos las diferentes opciones para la proteína cutánea más vital de todas.
Polvo de colágeno marino, relleno dérmico de colágeno, cremas con colágeno... en 2018, hay más opciones que nunca para reponer el 1% de colágeno que la piel pierde cada año a medida que envejece. Veamos las distintas maneras de incorporar esta proteína.
Bébelo
El colágeno bebible, mezclado con vitamina C, o puro pero en forma líquida normalmente proviene de una fuente marina. Los fabricantes afirman que este colágeno al ser ingerido, es absorbido por el cuerpo y llevado directo a la dermis a través de los vasos sanguíneos, para trabajar desde dentro para restaurar y nutrir la piel. De hecho, existen pruebas clínicas que demuestran que el colágeno bebible puede conducir a un aumento en la densidad del colágeno y la firmeza de la piel.
Por otro lado, otros estudios encontraron una reducción notable en la sequedad de la piel, las arrugas y la profundidad de los pliegues nasolabiales. En otras palabras, el colágeno bebible realmente contrarresta los signos del envejecimiento natural. En este caso puntual, el colágeno estudiado se obtuvo a partir del cartílago de pescado, que también contiene ácido hialurónico de bajo peso molecular y ciertas vitaminas y minerales.
Tómalo en forma de pastilla
El colágeno hidrolizado abunda en tabletas, que están compuestas por las fibras de colágeno que se han descompuesto con el objetivo de absorberse mejor por el organismo. Durante los últimos años, los científicos han tratado de establecer si el colágeno ingerido en forma de píldora efectivamente llega a la dermis. Un estudio de 2015 sugiere que después de 8 semanas de un suplemento de colágeno oral, los investigadores encontraron que la densidad del colágeno en la dermis aumentó significativamente.
Otros experimentos demostraron que los péptidos de colágeno inducen el colágeno así como la producción de glicosaminoglicanos (otro componente de la red de soporte de la matriz extracelular de la piel) que ofrece una razón mecánica para los efectos clínicos observados.
Colágeno inyectable
Desde los años 70, el colágeno inyectable (a menudo hecho de una fuente bovina) ha estado disponible como relleno de arrugas. A diferencia de las formas bebibles y las píldoras, el colágeno inyectable se dirige a zonas específicas de la cara. Se deben cumplir condiciones clínicas estrictas y el procedimiento no suele ser permanente, sin embargo, existen afirmaciones de que estas inyecciones pueden estimular la producción de colágeno del cuerpo.
Ingredientes
El colágeno es una gran proteína, sus fibras son más grandes que nuestros poros y, por lo tanto, no pueden ser absorbidas por la piel. Sin embargo, el colágeno en sí no tiene que estar dentro de la fórmula del cuidado de la piel para tener un impacto positivo: existen ingredientes conocidos que se pueden absorber fácilmente y que tienen una acción comprobada sobre la producción de colágeno ya que literalmente se comunican con las células de la piel para producir más. Uno de los más potentes son los péptidos, los superactivos clínicamente probados in vitro para aumentar la síntesis de colágeno y detener su disminución.
El especialista en colágeno, la gama Liftactiv de Vichy, rellena la piel con péptidos para atacar los signos visibles de la pérdida de colágeno en la piel: arrugas, flacidez, pérdida de firmeza y tonicidad con eficacia acumulada comprobada a lo largo del tiempo.